¿Usted
Está Preparado
Para
La Muerte?
¿Será
Su Hora Fatal?
¡Lea
Las Enseñanzas De La Honrosa Muerte de Jesús!
32 Llevaban También Con Él A
Otros Dos,
Que
Eran Malhechores,
Para
Ser Muertos.
33 Y
Cuando Llegaron Al Lugar
Llamado
De La Calavera,
Le
Crucificaron Allí,
Y A
Los Malhechores,
Uno
A La Derecha
Y
Otro A La Izquierda.
34 Y
Jesús Decía:
Padre,
Perdónalos,
Porque
No
Saben Lo Que Hacen.
Y Repartieron
Entre Sí
Sus
Vestidos,
Echando
Suertes.
35 Y El Pueblo Estaba Mirando;
Y
Aun Los Gobernantes
Se
Burlaban De Él,
Diciendo:
A Otros
Salvó;
Sálvese
A Sí Mismo,
Si
Éste Es El Cristo,
El
Escogido De Dios.
36 Los Soldados
También
Le Escarnecían,
Acercándose
Y
Presentándole Vinagre,
37 Y
Diciendo:
Si Tú
Eres El Rey De Los Judíos,
Sálvate
A Ti Mismo.
38 Había
También Sobre Él
Un
Título Escrito
Con
Letras Griegas, Latinas Y Hebreas:
ESTE
ES EL REY DE LOS JUDÍOS.
39 Y
Uno De Los Malhechores
Que
Estaban Colgados
Le
Injuriaba,
Diciendo:
Si Tú
Eres El Cristo,
Sálvate
A Ti Mismo
Y A
Nosotros.
40 Respondiendo
El Otro,
Le
Reprendió, Diciendo:
¿Ni
Aun Temes Tú A Dios,
Estando
En La Misma Condenación?
41 Nosotros,
A
La Verdad, Justamente Padecemos,
Porque
Recibimos
Lo
Que Merecieron
Nuestros
Hechos;
Mas
Éste Ningún Mal Hizo.
42 Y
Dijo A Jesús:
Acuérdate
De Mí
Cuando
Vengas En Tu Reino.
43 Entonces
Jesús Le Dijo:
De Cierto
Te Digo Que
Hoy
Estarás Conmigo
En
El Paraíso.
Comentario:
1.- El ladrón arrepentido colgado en una cruz
al lado de Jesús no tenía absolutamente nada que ofrecer al Señor: ninguna obra
buena, ningún servicio fiel.
Tampoco podía ser
bautizado.
En su condición de
impotencia absoluta, lo único que podía hacer era creer.
Pero eso era todo lo que
necesitaba, pues tener Fe En Jesucristo Es Lo Único Que Se Necesita Para Ser
Salvo.
2.-
Aunque ambos ladrones crucificados
comenzaron lanzando insultos a Jesús, mientras transcurrían aquellos agonizantes
minutos, uno de ellos experimentó un cambio de corazón. Sus ataques al Salvador
se transformaron en una censura al otro criminal, y luego en una defensa de
Jesús, en la admisión de su propia culpa, y en el ruego de tener un lugar en el
reino de Cristo ”Hallo La Salvación”.
44 Lo Mismo Le
Injuriaban También Los Ladrones Que Estaban Crucificados Con Él.
40 Respondiendo El
Otro, Le Reprendió, Diciendo: ¿Ni Aun Temes Tú A Dios, Estando En La Misma
Condenación?
41 Nosotros, A
La Verdad, Justamente Padecemos, Porque Recibimos Lo Que Merecieron Nuestros
Hechos; Mas Éste Ningún Mal Hizo.
42 Y Dijo A Jesús:
Acuérdate De Mí Cuando Vengas En Tu Reino.
3.-
¿Qué fue lo que convirtió a este
escarnecedor en creyente?
Si tenía poco conocimiento
previo de Jesús. Escuchó las burlas de la muchedumbre, y ellas le dieron la
información que necesitaba para ser salvo. Los despectivos espectadores
acusaban a Jesús de ser exactamente quien era:
¡”El Rey De Israel”!
42 A
Otros Salvó, A Sí Mismo No Se Puede Salvar; Si Es El Rey De Israel, Descienda
Ahora De La Cruz, Y Creeremos En Él.
43 Confió
En Dios; Líbrele Ahora Si Le Quiere; Porque Ha Dicho: Soy Hijo De Dios.
Mientras El Condenado Veía
Y Escuchaba, Se Volvió Con Fe A Aquel Que Podía Salvarlo: A Aquel Que Estaba Muriendo
Por Él.
Desenlace:
Ese Día, En Aquella Colina,
Un Hombre Murió En Su Pecado,
Jesús El Hijo Del Hombre Murió Por El Pecado
Y Otro Hombre Fue Salvo De Su Pecado.
Solamente Hay Dos
Respuestas A La Muerte Inevitable Del Hombre Natural:
Se acepta o se rechaza el pago expiatorio de Cristo por
nuestros pecados.
¿Cómo responderá usted a
esa alternativa?
“Yo acepté a Cristo Como
Mi Salvador y Espero Morar En Su Gloria Para Siempre.” ¡Amén!
Sábado, 28 de Enero de
2017